PESAR
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PESAR:
En estos tiempos es difícil entender el verdadero sentido de
las palabras que empleamos.
Con la formación científica con la que me eduqué, debo buscar
su significado en el diccionario y creer en aquello que define… pero como
enfermera y como persona, he conocido otros tipos de “pesares” que no coinciden
demasiado con la definición pero que se cargan en el alma con el mismo peso,
fuerza y tristeza.
Todos tenemos algún tipo de pesar horrible y cada uno lo
libera a su manera, aunque “el pesar” no puedes controlarlo.
Ante un pesar horrible, puedes actuar de miles de formas:
puedes negarlo, ocultarlo, rodearlo de pensamientos que lo justifiquen, buscar
la causa que lo ha originado…pero todo pesar hay que liberarlo.
Otra
de las definiciones que encontramos en la RAE es: (Del lat. pensāre).
1. tr. Determinar el peso, o más propiamente, la masa de algo por medio de la
balanza o de otro instrumento equivalente.
2. tr. Examinar con atención o considerar con prudencia las razones de algo
para hacer juicio de ello.
No me resulta extraño pensar que tanto “pesar” en el sentido
de determinar el peso o volumen, como “pesar” como sentimiento tengan tanta
relación con una carga, un lastre adosado al cuerpo o al alma que cambia la
manera en que percibimos las cosas o como las justificamos.
Sea cual sea la causa del “pesar”solo nos queda ser sinceros,
decir la verdad y afrontarlo, para liberarnos de él tan pronto sea posible,
porque cuando crees que ya lo has superado… vuelve otra vez y otra y te deja
sufriendo.
Algunos, no solo la
gente mayor, se pasan la vida recordando acontecimientos pasados. Otros, se
dedican a evocar proyectos que raramente se realizan y que son la causa para
cambiar sus vidas… En ambos casos. La liberación y la felicidad residen
precisamente en el lugar en el que no se está.
Un pesar pasado, irrecuperable puede ser evocado, pero es un
error convertirlo en el foco de nuestros pensamientos. Los pesares por los
planes no realizados son inciertos en todos los sentidos, como el futuro mismo
y basta con que deseemos ardientemente alcanzar algún objetivo para que, una
vez logrado, exclamemos para nuestros adentros: “ ah, asi que era eso” y nos liberemos…
Por lo que puedo deducir, que solo disponemos del momento
presente y más nos vale disfrutar el aquí y ahora, pues lo que hacemos en cada
instante determina nuestra felicidad futura y la calidad de nuestros recuerdos.
Cualquiera que sea nuestra situación, debemos aprovechar lo
que ésta nos ofrece y no perder el tiempo preguntándonos cómo sería…
Tal vez tu existencia se fundamente en expectativas, en una
felicidad por llegar…
Abre los ojos, se sincero, di siempre la verdad y abraza al
momento presente. Es la mejor manera que he encontrado para liberarme del
PESAR.
